Los coches siguen siendo uno de los objetos más deseados por los ladrones. El año pasado se registraron en España 24.990 vehículos robados, según Hellosafe, y aunque supone un descenso del 5,4% respecto al ejercicio anterior, sigue siendo un número muy alto. Por ello, aunque se pueda detectar si han intentado abrir el coche, mejor prevenir que curar, por lo que es muy importante conocer los trucos que tienen los criminales para llevarse los vehículos.
Desde colocar objetos punzantes en las ruedas hasta incluso utilizar la tecnología avanzada, los ladrones utilizan métodos muy diversos para robar los coches, algunos de ellos extremadamente simples. Ese es el caso del conocido como ‘truco de la moneda’, un sistema muy sencillo a la par que efectivo y que permite abrir los vehículos con suma facilidad.
¿En qué consiste el truco de la moneda?
Este método es muy simple: los ladrones ponen una moneda, por lo general del tamaño más pequeño posible, en la manija de la puerta del coche. Esto hace que al abandonar el vehículo este no se cierre correctamente, ya que evitará que el pestillo haga contacto y así pueden entrar de manera muy fácil en el automóvil.
Una vez dentro del coche, pueden campar a sus anchas por el habitáculo, robando todo tipo de objetos de mucho o poco valor, así como documentación o incluso el propio coche, y en esos casos no hay superllavero que pueda ayudar. Además, los ladrones no tienen por qué poner la moneda en la puerta del conductor, por lo que es crucial cerciorarse de que todas están cerradas antes de irse.
¿Qué otros métodos se utilizan para robar coches?
Además del truco de la moneda, los ladrones también utilizan otros métodos de muy diversa índole para intentar abrir un coche ajeno. Uno de los más comunes es pinchar uno de los neumáticos del vehículo cuando el propietario está despistado o alejado de él. El objeto punzante hará que el conductor tenga que bajarse a cambiar la rueda, y es ahí cuando aprovecharán para hacerse con el vehículo.
Un método diametralmente opuesto en complejidad, pero igual de efectivo, es el hackeo. La mayoría de coches actuales tienen una llave contactless que permite abrir y cerrar el vehículo a distancia, lo que aprovechan los criminales digitales para bien hacer una copia del dispositivo o corromperlo en su favor.
¿Cómo localizar un coche robado?
Si el propietario del vehículo no ha podido evitar el robo, hay multitud de dispositivos que ayudan a conocer la localización exacta del coche para intentar recuperarlo antes de que sea demasiado tarde, como por ejemplo sistemas de rastreo, aunque también se puede conectar una alarma del coche al teléfono móvil, ya que suelen venir equipadas con GPs.
Source: Coches