Las lluvias pueden complicar la conducción. Durante estas semanas, en España, se está viviendo un episodio de precipitaciones que parece no tener fin. Por este motivo, y ante la gran cantidad de agua que está cayendo en algunas zonas del país, la conducción se vuelve especialmente peligrosa, por lo que es fundamental extremar la precaución.
Cuando las lluvias son intensas el asfalto se vuelve deslizante, es decir, se crea una especie de película de agua que puede terminar produciendo el temido aquaplaning. Si nos encontramos con este efecto debemos tener mucho cuidado porque el vehículo se puede desplazar de forma incontrolada porque el agua impide la adherencia de las ruedas al pavimento.
Sin embargo, existe una serie de trucos que recomiendan los mecánicos que pueden ayudar a mejorar la tracción del coche en los días de fuertes precipitaciones. Es cierto que ya son muchos los conductores que están concienciados de la importancia que tienen los neumáticos en este tipo de situaciones.
El truco de los mecánicos para que los neumáticos agarren más en la lluvia
Lo primero que debemos tener en cuenta es que los neumáticos tienen que mantener siempre la presión que recomiendan los fabricantes. Este dato esta disponible en el libro de instrucciones, pero también en el marco de la puerta o en la tapa del depósito del combustible. Sin embargo, parar los días de lluvia, los mecánicos suelen recomendar subir un poco la presión para evitar el aquaplaning.
De hecho, si se inflan las ruedas del coche 0,5 bares vamos a conseguir que la zona de contacto con el agua sea mucho más pequeña porque solo toca la parte central en el asfalto. Esto quiere decir que estaremos evitando que el neumático ‘flote’ y se produzca el aquaplaning.
Además, debemos tener en cuenta que cuando ha llovido o está empezando debemos bajar un poco la presión para aumentar esa superficie de contacto.
Source: Coches