La movilidad está cambiando. Las restricciones a los vehículos más contaminantes y el impulso a los motores con emisiones reducidas van cambiando, poco a poco, las tendencias de compra y venta de nuevos coches, sobre todo para el uso urbano y diario. Igualmente, la irrupción de nuevas opciones de movilidad, como las bicicletas eléctricas y los patinetes eléctricos, obligan a modificar la manera de pensar y ver el tráfico urbano.
El 71% de los españoles considera importante encontrar una opción de movilidad urbana sostenible para el día a día, según muestran los resultados del nuevo estudio llevado a cabo por Cetelem. Para conseguir este objetivo, un 77% de los encuestados considera importante llevar a cabo acciones en las ciudades para regular y mejorar la movilidad urbana sostenible y un 83% apuesta por que las instituciones públicas inviertan en medios de transporte ecológicos.
Esta tendencia ha propiciado, asimismo, un cambio en la mentalidad de los ciudadanos. El 42% de los españoles se ha planteado el cambio de su transporte privado por el uso de alternativas de movilidad sostenible, aunque de este porcentaje no todos los encuestados han sopesado las mismas opciones. Un 49% apostaría por el transporte urbano para moverse libremente por la ciudad, mientras que el 39% escogería la bicicleta para desplazarse a diario y un 23% se lanzaría a por un patinete eléctrico.
Los coches con motor de combustión van perdiendo protagonismo en las ciudades al mismo tiempo que en la mente de los consumidores a favor de los coches eléctricos e híbridos, pero este tipo de vehículos de emisiones reducidas o inexistentes solo serían una opción de cambio para el 19% de aquellos que se han planteado sustituir su vehículo privado.
La distancia entre el domicilio y el trabajo, unas infraestructuras inadecuadas y las dudas en cuanto a la seguridad en el uso de los transportes alternativos son algunas de las barreras a las que se enfrentan estas nuevas formas de desplazarse. Estas dificultades se hacen más palpables en el caso de los coches eléctricos, ya que la falta de una infraestructura de recarga sólida y el precio inicial de venta del coche lastran la implementación de estos vehículos como elección para una movilidad más responsable y ecológica.
En cuanto a la intención de compra, un 40% de los encuestados se plantea cambiar su vehículo dentro de los próximos 2 años frente a un 10% que ni siquiera se ha planteado la opción de cambiar sus hábitos de movilidad. Entre las opciones preferidas para la compra se impone el coche eléctrico puro, pese a las dificultades antes señaladas, con un 11% de conductores a los que les gustaría comprarse un vehículo de este tipo.
Los híbridos enchufables se quedan en segundo lugar con un 10% de intención de compra y los motores de gasolina y diésel suma, entre los dos, un 9% de intención de compra Los híbridos no enchufables, por último, quedan relegados a la última posición con un 7% de intención de compra.
Source: Coches
