Desde este verano, los vehículos para transporte de pasajeros homologados llevar instalado un alcoholímetro antiarranque, que funcionan bloqueando el arranque del motor a no ser que el conductor sople y de un nivel de alcoholemia por debajo de los obligatorio. En el caso de los conductores profesionales, esta tasa debe ser de 0,15 máximo en aire espirado.
Existen, como en todo, varios modelos disponibles en el mercado y se prevé que la oferta crezca de cara a que esta medida pueda extenderse a los turismos y vehículos privados. En España, una empresa malagueña ya ha patentado el primer alcoholímetro antiarranque del mercado, Drivelock, que comparte nombre con la propia compañía.
Drivelock es «el primer alcoholímetro inmovilizador de vehículos inalámbrico del país», como lo define la empresa, patentado y fabricado en España, y nace con el objetivo de reducir el número de accidentes de tráfico por consumo de alcohol, impidiendo arrancar el coche a quienes hayan bebido.
Así funciona Drivelock
El sistema de Drivelock integra la terminal con una app móvil que permite llevar el control de alcohol en sangre midiendo el del aire espirado. Ofrece una medición fiable y precisa sobre el nivel de alcohol del conductor gracias a la tecnología de sensor de celda de combustible electroquímico, que analiza el aliento.
El usuario sopla a través de la boquilla y el dispositivo transmite los datos al teléfono para mostrar el nivel de alcohol en sangre. Este proceso hay que hay realizarlo frente a la cámara del móvil para poder obtener el resultado, así nos aseguramos que no sea otra persona la que sople en lugar del conductor.
Drivelock necesita ser calibrado una vez al año, para lo que la empresa ha creado su propio centro de calibración de alcoholímetros en Málaga, el primero en el país. Además, una de sus principales ventajas de Drivelock es que no necesita homologación en la ITV ya que no manipula la instalación de serie del vehículo.
Source: Coches