La agresividad al volante no es buena compañera, como tampoco lo son la irresponsabilidad y la falta de respeto a las normas de seguridad vial. Este tipo de actitudes suelen provocar la mayoría de accidentes en la carretera y el 55% de los conductores españoles admite tener conductas de riesgo al volante.
Así lo desvela el informe de la Fundación Línea Directa y Fesvial, que recuerdan que conductas como el consumo de drogas o alcohol, el uso del móvil y el exceso de velocidad son las causas principales de los incidentes de tráfico. En España, unas 1.800 personas fallecen cada año y otras 8.900 resultan heridas de gravedad en las carreteras.
Este 55% de conductores temerarios se traduce en 15 millones de vehículos que no respetan las normas de tráfico, sobre todo en la carretera o el autovía. De este total, 7 millones de personas (el 26%) reconocen no respetar la distancia de seguridad, 3’7 millones (el 14%) confiesan conducir hablando por el móvil y 2’8 millones (el 10%) confiesa coger el coche bajo los efectos del alcohol.
Pero el dato más preocupante sea, quizás, el que se refiere a los excesos de velocidad: de los 15 millones de conductores temerarios, el 43% (12 millones) no respeta los límites impuestos ni en ciudad ni en carretera.
De esta cantidad, hay 220.000 conductores (pese a que apenas son el 0’8% representan un grave problema) que ha reconocido conducir a más de 200 kilómetros por hora en las autopistas y autovías. Este exceso de velocidad es preocupante, ya puede provocar fácilmente un accidente con heridos graves o víctimas mortales.
A este número de conductores hay que sumarle otros 245.000 (el 0’9%) que suele alcanzar los 110 kilómetros por hora en zonas urbanas, con el peligro que esta velocidad supone, sobre todo, para los peatones y ciclistas. Estos colectivos son quienes más atropellos sufren y, por tanto, los más vulnerables a los excesos de velocidad en ciudad.
Source: Coches