“Los aranceles y el proteccionismo no funcionan” Esta es una de las declaraciones que ha realizado Wayne Griffiths, el consejero delegado de las marcas Seat y Cupra, durante la presentación de resultados que tuvo lugar el pasado jueves en la planta barcelonesa de Martorell.
Y es que el Tavascan, el nuevo SUV eléctrico de Cupra, está afectado por las cargas impositivas a aquellos modelos fabricados fuera de Europa y este coche se produce en China.
Un obstáculo que, según sus palabras, “ ha perjudicado la rentabilidad del ejercicio” pese a anotar los mejores resultados de todo el grupo Volkswagen. De cara a buscar una solución, el ejecutivo británico está negociando con la Unión Europea la consiguiente exención fiscal para los aranceles.
Cupra ya piensa en los Estados Unidos
Aún así, las dos marcas españolas han estado a la altura de las circunstancias obteniendo un beneficio récord en 2024 de 633 millones de euros.
Se han vendido un total de 612.000 unidades entre ambas y Cupra ha vuelto a demostrar su excelente estado de forma y eso que es una marca que acaba de desembarcar en el mercado como aquel que dice.
De cara a este año, uno de los objetivos es el de tomar la decisión de lanzarse al mercado norteamericano precisamente bajo la enseña Cupra. “Nuestro objetivo es estar en 2030 como el paso más adecuado para esta marca y, de paso, contribuir a que mejore la cuota del grupo en Estados Unidos”.
En cuanto a la transición hacía el coche eléctrico, Griffiths manifestó que “los coches los tenemos, pero ahora lo prioritario es convencer al cliente sobre sus ventajas además de que haya un plan fiscal del Gobierno y la infraestructura necesaria. Europa y España deben ser valientes y tener la confianza para aprovechar esta oportunidad, porque la electrificación es irreversible. Nuestro compromiso en esta dirección es claro”.
Source: Coches
