Los chalecos reglamentarios son aquel complemento que pasa desapercibido pero por el que, de no tenerlo, acabaremos recibiendo una sanción de tráfico. Hay que llevar uno siempre en la guantera del coche, en el cofre de la moto o incluso en la mochila cuando vamos en bicicleta o patinete, ya que cualquier usuario dele tráfico puede acabar necesitando esta llamativa prenda.
El primer escenario en el que es obligatorio su uso es en el caso de tener un accidente o una avería en carretera. Ahí, cuando salimos del vehículo para colocar los triángulos de señalización para advertir que estamos parados en el arcén, hay que colocarse el chaleco. Salir del coche o estar en el arcén sin llevar colocada esta prenda reglamentaria está considerado una infracción grave en el Reglamento de Circulación, por lo que va de la mano con una multa de 200 euros.
La importancia de llevar correctamente el chaleco reflectante es evitar atropellos en carretera, un incidente que casi siempre tiene un resultado mortal. Con un chaleco puesto, los conductores son capacidades de vernos a más de 150 metros y poder frenar para evitar un accidente, aunque todo dependerá del momento del día y de las condiciones atmosféricas.
También para bicis y patinetes
Otro escenario en el que es obligatorio llevar siempre puesto el chaleco reflectante es para usuarios de bicicletas o vehículos de movilidad personal entre el atardecer y el ocaso y en condiciones de visibilidad reducida, como niebla o lluvia. Igualmente, también es obligatorio en túneles (aunque los patinetes eléctricos no pueden circular por ellos en todos los casos).
De no llevar el chaleco durante la conducción nocturna, la multa también ascenderá a los 200 euros y estará considerada una infracción grave. Este uso del chaleco debe ir acompañado del correcto uso de las luces, cuya ausencia está sancionada con 80 euros de multa.
Source: Coches