La Inspección Técnica del coche o la moto particular siempre es una preocupación más que hay que acordarse de gestionar. Pero, este año, debido a la situación excepcional que se ha instalado en todos los aspectos de la vida cotidiana, quizás lo sea un poco más.
Desde acabara el estado de alarma, millones de automóviles y motocicletas que vieron como sus tarjetas caducaban han tenido que acudir a actualizarlas. Pese a contar con prórrogas para evitar la saturación, durante las primeras semanas de apertura de los centros se contabilizaron cinco millones de vehículos en espera para ser atendidos.
Los centros dedicados a realizar estas inspecciones funcionan, la mayoría, con cita previa, ya que es el modo más sencillo de regular la afluencia de vehículos, el aforo (para mantener las distancias de seguridad) y, también, de gestionar el alto volumen de vehículos que todavía tienen sus ITV pendientes.
Lo primordial al solicitar este servicio es entender que por el alto volumen de vehículos que necesitan este servicio algunos centros han estado colapsados y sin citas. Lo mejor es reservar fecha en el calendario con antelación, para que no expire el periodo de prórroga que nos corresponda.
Para seleccionar la fecha, hay que consultar el centro en el que se quiere examinar el vehículo (dependiendo del lugar de residencia, por ejemplo). La gestión de estas estaciones es privada y, por tanto, cada uno tendrá su propia web y número de teléfono.
En caso de poder llamar, el trámite será rápido y sencillo. En algunas estaciones también es posible solicitar la cita por internet. Habrá que ir a la web del centro de preferencia y hacer el trámite, para el que se necesitarán algunos datos:
En caso de no poder acudir en el día seleccionado, muchos de estos centros permiten modificar o anular la cita. De encontrarse en esta situación, se recomienda modificarla pero no cancelarla, para evitar que por el alto volumen de demandas expire el plazo para obtener la nueva ITV, lo que conlleva el pago de una multa.
Source: Coches
