Los coches de siete plazas han encontrado su hueco en el mercado del automóvil y, lejos de parecer modelos exclusivamente familiares, han demostrado su versatilidad adaptándose a diferentes estilos y necesidades.
Pese a esta versatilidad, no dejan de ser vehículos con unas características muy concretas por lo que antes de adquirir uno será muy necesario observar que encaja con lo que se necesita de un coche. Y es que el tamaño no lo es todo.
Hay muchos de estos modelos que más que ser siete plazas son 5+2, ya que permiten la posibilidad de desplegar dos asientos extra en caso de necesitarlos de manera puntual, aunque estas dos plazas no son excesivamente cómodas.
Si estás buscando un coche de este estilo o te llaman la atención los monovolúmenes, haz una lista de pros y contras antes de ir al concesionario. Seguramente te ayude a tomar una decisión.
La mayor ventaja de estos coches es, sin duda alguna, el espacio. Tanto en el habitáculo como en el maletero, estos vehículos suelen tener hueco para todo y para todos. Normalmente, los asientos traseros suelen ser perfectos para colocar los sistemas de retención infantil sin problemas de espacio.
Además, estos coches permiten un gran volumen de carga ya que los asientos son desmontables o plegables (casi todos). También permiten enganchar remolques mayores. Por esto mismo, la versatilidad del vehículo es inimaginable.
Por último y aunque pueda no parecerlo, son más sostenibles, ya que evitan tener que viajar en dos coches y duplicar el consumo y el gasto.
El primero, sin duda, es el precio. Este tipo de vehículos tiene un coste más elevado por sus características y tamaño. Además, también tienen un consumo más elevado en combustible.
Por otro lado, es un coche más difícil de aparcar, por lo que encontrar un sitio en la calle se puede convertir en toda una odisea… debido al tamaño. Y, encima, las dos plazas extra de la última fila hay veces que tienen una talla demasiado reducida para adultos.
Source: Coches
