Lun. Dic 23rd, 2024

Sacarse el carnet de conducir es una de las metas que muchas personas se ponen de cara al nuevo año o cuando cumplen la mayoría de edad. Lo cierto es que no siempre es un proceso sencillo, pero una vez que se supera, la satisfacción de poder conducir tu propio coche e ir a casi cualquier parte con total libertad merece del todo la pena. En este sentido, los nervios juegan un papel fundamental y es imprescindible mantener la calma, en el examen teórico, pero sobre todo en el práctico, donde un mal movimiento o decisión puede acabar con tu sueño de lucir la ansiada L.

Bien es cierto que de poco o nada sirve aconsejar a alguien que está a punto de examinarse de que no pierda los nervios, pues no siempre es fácil controlarlos. No obstante, el tiempo y la experiencia de alumnos, examinadores y profesores de autoescuela han demostrado que existen una serie de claves indispensables para acudir a la prueba lo más relajadamente posible y conseguir aprobarla. Estas son algunas de las que recomiendan desde la página web de Autoescuela Lara.

Seguridad y confianza, ante todo

El nivel de estrés y tensión que puedes llegar a tener el día del examen práctico de conducir se verá notablemente reducido si acudes al mismo con seguridad y confianza. Para lograrlo, lo principal es haber dado un número considerable de clases prácticas con el objetivo de experimentar el máximo de situaciones que podrían darse durante la prueba mientras circulas. De esta forma, no te compares con amigos y familiares y toma cuantas prácticas como necesites o te permita tu presupuesto. Si esto no es suficiente para paliar tus nervios, opta por métodos relajantes naturales como las infusiones de valeriana.

Conoce el coche que vas a conducir

El coche con el que vas a examinarte es clave, por lo que conviene conocerlo al detalle. Esto no solo te permitirá superar con éxito las preguntas previas sobre mecánica que suele hacer el examinador antes de ponerte en marcha, sino que, además, te servirá para creer que lo tienes todo bajo control: desde saber cómo actuar si se empaña el cristal a poner las luces adecuadas si la visibilidad no es la adecuada.

Estudia a fondo el entorno

De la misma forma que es importante saber todos y cada uno de los elementos que componen el vehículo con el que vas a hacer la prueba, es vital conocer el lugar desde donde vas a empezarla (normalmente, el Centro de Exámenes de la DGT correspondiente). Y las calles próximas a este enclave por las que, a buen seguro, circularás, ya sea para salir del punto de encuentro, como para regresar al mismo.

Empieza con buen pie

En la mayoría de casos, un buen inicio marca cómo será el resto del examen práctico. Por eso, después de que el examinador se haya subido al coche y le hayas saludado educadamente, debes hacer las comprobaciones básicas: ajuste del asiento, espejos… y abrocharte el cinturón de seguridad. Una vez iniciada la marcha, no tengas prisa y deja que sea el examinador quien te guíe.

Haz simulacros de examen

La mejor manera de coger experiencia para el examen práctico de conducir no es otra que practicar y practicar. En este sentido, además de hacer clases de circulación, puedes pedirle a tu profesor de autoescuela que, llegados a la recta final de las clases, se ponga en la piel de un examinador y llevéis a cabo, tal y como sería, un examen práctico de principio a fin. De esta forma podrás evitar ese ‘miedo a lo desconocido’ y a aprender a actuar frente a todo tipo de circunstancias.

Siempre el mismo vehículo

Si hay algo en lo que profesores y examinadores coinciden es en que bajo ningún concepto utilices otros vehículos mientras estás aprendiendo. Más allá de que conducir un coche sin carnet sin una persona titulada como profesor de autoescuela es un delito, podrías coger ciertas manías o vicios a la hora de conducir que llegarían a convertirse en faltas leves e, incluso, graves durante el examen.

Comunícate con el examinador

Por mucho respecto que pueda causarte el examinador, no deberías tenerle miedo. Si te saltas alguna indicación durante la prueba, mantén la calma, pues cuentan con que suceda. Lo importante es que no lo hagas de forma reiterativa. Si no le has oído bien o no terminas de entender sus comentarios, no dudes en preguntarle.

Si suspendes, vuelve a intentarlo

Suspender el examen práctico de conducir no es el fin del mundo, aunque pueda parecerlo. Aunque hay quienes tienen la fortuna de sacárselo a la primera, no es lo habitual, ya que las situaciones que pueden darse en la carretera son muy distintas en cada caso. Lo importante es que si, finalmente, no eres apto, no tires la toalla y sigas intentándolo, volviéndote a presentar lo más pronto posible, para no perder la experiencia adquirida durante las clases previas.


Source: Coches

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por admin