Lancia es una marca con una dilatada historia, y tras unos años sin apenas actividad, la corporación a la que pertenece, Stellantis, ha apostado por devolverla a la vida por la puerta grande.
El primer paso ha sido desarrollar un prototipo, que es el que marca el camino de lo que quiere ser la nueva Lancia, y desde luego el resultado no puede ser más prometedor, pues deja claro que innova en diseño, apuesta firmemente por la electrificación y se coloca en el segmento premium.
Como ha afirmado Luca Napolitano, CEO de Lancia, al desvelar el prototipo este fin de semana en Milán, el Pu+Ra HPE “es la visión de la marca para los próximos 10 años, que introduce a la firma en la era de la movilidad eléctrica y resume nuestra forma de concebir y vivir el automóvil. Empezando por el nuevo Ypsilon, nuestros coches del futuro se inspirarán en este prototipo”.
La denominación de Pu+Ra hace referencia al nuevo lenguaje de diseño de la marca, puro y radical, mientras que HPE, siglas que se utilizaron ya en los años 80 como símbolo de deportividad y funcionalidad, significan ahora High Performance Electric (Alto Rendimiento Eléctrico).
En el diseño de este coupé se puede apreciar el peso de la aerodinámica, pero también hay guiños al pasado de la marca, en el que la deportividad y la competición han tenido mucha importancia. Destaca en este sentido la fuerza del frontal, donde una “Y” iluminada y otras dos en vertical se encargan de poner el toque de distinción, junto con una parrilla cerrada de líneas suaves y un prominente alerón.
El lateral es musculoso y ensanchado para dar sensación de fuerza y aplomo, mientras que la trasera presenta unas ópticas redondas y en relieve que son un guiño al Stratos, uno de los modelos de referencia de Lancia en los años 70 del siglo pasado.
Por supuesto, en el prototipo no falta el renovado logotipo de la marca en los laterales, ya que delante y detrás aparece destacado el nombre de la marca.
Para el interior, la innovación viene de la mano de Cassina, una referencia en el sector del mueble de gama alta italiano, cuya experiencia e inspiración ha servido para crear un nuevo concepto y un ambiente acogedor jugando con formas, tapicerías, texturas y colores, aprovechando la gran luminosidad que confieren las ventanas y, sobre todo, el techo circular de visión panorámica.
En cuanto a la mecánica eléctrica, no se han ofrecido datos de potencia ni rendimiento, pero sí se ha especificado que permitirá recorrer más de 700 km con una sola carga, que el consumo estará por debajo de los 10 kWh a los 100 km y que para recuperar energía serán necesarios poco más de 10 minutos, cifras indudablemente de referencia para este tipo de vehículos.
Por su parte, otro de los focos tecnológicos estará en la interfaz virtual e inteligente S.A.L.A (Sound Air Light Augmentation), un sistema de última generación que centraliza las funciones de sonido, climatización e iluminación permitiendo al conductor o el pasajero adaptar el ambiente dentro del coche con solo tocar un botón o mediante la voz. Esta solución, como algunas otras vistas en el prototipo Pu+Ra, se verán ya en el nuevo Lancia Ypsilon, un modelo que se fabricará en la planta de Stellantis en Figueruelas (Zaragoza) y que se lanzará en 2024.
Source: Coches
