Después de verlo y tocarlo en la presentación estática en mayo, teníamos muchas ganas de poder sentarnos al volante y, desde luego, no nos ha defraudado. Han sido pocos kilómetros, pero suficientes para darnos cuenta de lo mucho que ha cambiado este modelo a todos los niveles. Hablamos de la versión de carrocería de cinco puertas, ya que la recién anunciada SW familiar llegará un poco más adelante.
A pesar del crecimiento en el mercado de los modelos tipo SUV, el segmento C de los compactos sigue siendo muy importante, ya que aglutina el 15% de las ventas. Para Peugeot es un segmento estratégico fundamental, en el que el 308 ha estado siempre en la cúspide y se han vendido más de 1.300.000 unidades, que se dice pronto.
Con el nuevo 308, la tercera generación, se pretende mantener esta línea de éxito, y recursos no le faltarán, visto lo visto. Y tan clave es este modelo para Peugeot, que ha sido elegido para portar el nuevo escudo de la marca, el que representa un cambio de etapa, los cual se puede aplicar a todo el coche.
Solo de un vistazo se nota lo mucho que ha cambiado, empezando por la parrilla con el lustroso y gran logotipo de la cara del león en el centro, y por supuesto las luces LED y los “colmillos” que identifican a los Peugeot más modernos. Todo el coche tiene unas formas musculadas, mucho más que antes, y la zaga destaca por un diseño limpio y ancho en el que sobresale el alerón integrado y las originales ópticas, también de LED, unidas por una franja oscura.
El tamaño importa
La longitud ha crecido 11 centímetros respecto al 308 precedente, una diferencia sensible que se siente en el interior gracias a los 5,5 cm más que tiene de distancia entre ejes, mientras que la altura se ha reducido en 2 centímetros.
Por dentro el esquema sigue fiel al concepto ergonómico y funcional del i-Cockpit, pero también sufre una profunda actualización que probablemente se extenderá poco a poco a toda la gama. Con una muy buena calidad de materiales, al menos en los acabados altos, la digitalización aumenta con el cuadro de instrumentos digital, disponible con un efecto 3D al que hay que acostumbrarse, y una pantalla central de infoentretenimiento de 10 pulgadas cuya interfaz ha mejorado, es más rápida y se asemeja mucho en el manejo a un smartphone. Además, como novedad admite actualizaciones inalámbricas “over the air”.
Bajo la pantalla, excepto en el acabado básico, aparece una franja dividida en pequeñas pantallas táctiles, que Peugeot denomina i-Toggles, que se pueden personalizar con funciones o acciones de uso habitual, pero además de eso en la parte inferior hay una serie de mandos “físicos” para entrar directamente en la configuración del vehículo y en el sistema de climatización. Para sacar jugo a todo ello hay que dedicarle un tiempo y aprendizaje, pero a la larga merece la pena.
En cuanto al resto del habitáculo, la mayor distancia entre ejes se ha trasladado a las plazas traseras, y desde luego se hace notar en el espacio para las piernas atrás, lo que agradecerán las personas altas. Por su parte, el maletero tiene unos interesantes 412 litros de capacidad, que en el caso de las versiones híbridas se recortan hasta los 361 litros.
Dos opciones híbridas con etiqueta Cero
La oferta del nuevo Peugeot 308 tiene como novedad fundamental la incorporación de dos mecánicas híbridas enchufables de gasolina con etiqueta Cero, una con 180 y otra con 225 caballos de potencia total, siempre con cambio automático de ocho velocidades. Además de eficiencia y unas prestaciones importantes, estos modelos pueden alcanzar los 60 kilómetros de autonomía eléctrica, lo que prácticamente asegura un uso diario sin emisiones. En un punto de recarga de 7,4 kW, con el cable tipo 2 que lleva el 308 híbrido de serie, la energía de la batería –de 12,4 kW de capacidad– se recupera en solo una hora y 40 minutos, mientras que en un enchufe doméstico el proceso se completa en poco más de 7 horas.
El resto opciones en cuanto a mecánica son dos motores gasolina PureTech de 110 y 130 caballos y uno diésel BlueHDi también de 130 caballos, los más potentes a elegir con cambio manual o automático EAT8.
Buenas sensaciones
Nosotros hemos tomado contacto con la versión híbrida más potente. La posición para conducir es muy cómoda, pero el volante compacto, según la altura del asiento o de la persona, sigue tapando ligeramente el cuadro de mandos. Por lo demás todo está muy a mano y muchas funcionalidades se pueden activar por voz, lo que resulta bastante útil en marcha.
Por lo demás, a falta de un test más profundo, hemos percibido una alta calidad al rodar, con un chasis bien asentado y un motor de 225 CV que reacciona de manera muy viva cuando se demanda potencia, sobre todo con el programa Sport. En zonas urbanas, solo con la energía eléctrica, el silencio acompaña y conducir así es siempre una experiencia muy agradable.
El nuevo 308 ya está a la venta desde hace unas semanas, pero las primeras entregas a los clientes están previstas para febrero con un precio de partida, con descuentos y financiación, de 20.500 euros. También se ha anunciado el lanzamiento y venta de la versión familiar SW –de la que hablaremos en su momento–, que llegará en primavera y costará 900 euros más que su homólogo de 5 puertas.
Equipado a la útima
La nueva generación del compacto francés se puede elegir con los acabados Active Pack, Allure, Allure Pack, GT y GT Pack, estas últimas de talante claramente deportivo por los detalles del exterior y del interior.
No obstante, ya desde la versión de acceso el equipamiento es sumamente interesante, con elementos como luces LED, llantas de 16 pulgadas, arranque sin llave, volante de cuero, cuadro digital y sistema de infoentretenimiento de 10 pulgadas, conexión inalámbrica con dispositivos móviles, climatizador bizona, freno de mano eléctrico, ayuda al estacionamiento trasero o alerta activa de cambio involuntario de carril.
A partir de ahí, la lista es enorme y variada, destacando en el siempre importante apartado de ayudas a la conducción recursos mejorados como el sistema de vigilancia de ángulo muerto de largo alcance (hasta 75 metros), alerta de tráfico trasero, la cámara de 360º en alta resolución o las luces LED matriciales autoadaptativas.
Source: Coches