El uso de drogas y alcohol al volante es una de las causas más frecuentes de accidente de tráfico. Erradicar esta costumbre también es uno de los principales objetivos de la Dirección General de Tráfico, por lo que dependiendo de la cantidad de alcohol o estupefacientes en sangre la sanción puede acabar en pena de cárcel.
Desde el pasado lunes, la DGT inició con la finalidad de controlar a los posibles conductores ebrios una campaña especial de vigilancia de alcoholemia y drogas que llega a su fin el próximo domingo. Por lo tanto, este fin de semana se prevé un aumento de los controles en las carreteras, ya que el sábado y el domingo son los días en los que se detectan mayores infracciones al volante de este tipo.
Desde Tráfico se ha advertido que podrá haber controles a cualquier hora del día y en cualquier tipo de vía y que, debido a la situación de emergencia sanitaria, se adoptarán todas las medidas necesarias para proteger tanto a conductores como a agentes.
Esta campaña se enmarca dentro de las actuaciones previstas para la TISPOL y está motivada por un registro del aumento de conductores que han abusado de las drogas y el alcohol al volante. La Dirección General de Tráfico ha constatado, en controles preventivos, aumento del 35% en 2019 a un 50% de los positivos en los test de alcoholemia. En el caso de pruebas realizadas tras producirse un accidente, ese porcentaje ha aumentado del 19% al 23%.
Pese a que este año la Navidad va a celebrarse de una manera diferente y no van a tener lugar tantas cenas ni comidas de empresa, la DGT apuesta por seguir vigilando las carreteras contra el consumo de sustancias estupefacientes al volante.
El año pasado, el alcohol fue la segunda causa de los accidentes mortales que se produjeron (24%), solo por detrás de las distracciones. En total, más de uno de cada tres conductores fallecidos había consumido alcohol u otras drogas.
Source: Coches
