Pese a que hace unos cuantos años que en España había dejado de escucharse hablar de este timo, la semana pasada se detectó un nuevo caso de trucaje del cuentakilómetros de un vehículo en Valencia.
Esta práctica afecta a los vehículos que están en el mercado de segunda mano y, además de modificar el valor real del modelo, puede poner en grave peligro la seguridad vial de su nuevo dueño al no declarar el estado en el que se encuentra el coche o furgoneta de ocasión.
¿En qué consiste el timo del cuentakilómetros? Antes de que la tecnología invadiera el mundo de la automoción, trucar el cuentakilómetros era un proceso mecánico. La llegada de los medidores digitales parecía el fin de este tipo de trucajes, pero la tecnología no solo avanza para lo bueno.
Modificar un cuentakilómetros digital es tan sencillo como conectar el dispositivo con el software adecuado al sistema OBD (sistema de diagnóstico) del vehículo y modificar la cantidad de kilómetros registrada en por el coche.
Aunque tras la revisión de un experto mecánico que analice si el estado real del vehículo concuerda con los kilómetros que se reflejan en el cuadro de controles del salpicadero, este trucaje es mucho más difícil de desvelar en los coches nuevos que en los viejos.
En los modelos más antiguos, la variación del cuentakilómetros debía hacerse manipulando piezas mecánicas en las que podía quedar algún rastro mientras que en los más actuales, como se ha explicado, ya no es necesario ni tan siquiera levantar el capó pues basta con un ordenador.
Desde numerosas asociaciones y organizaciones, como los clubs del automóvil o Carfax, se advierte de los peligros del timo del cuentakilómetros, que pueden comprometer la seguridad vial de los pasajeros y los demás conductores con los que se comparte carretera.
Al trucar el kilometraje real del coche, es habitual que las revisiones y los cambios de líquidos y filtros que necesita el vehículo para funcionar de manera segura y correcta no se efectúen a su debido tiempo. Esto puede provocar averías muy peligrosas.
También acarreará un gasto económico no previsto, ya que una elevada cantidad de kilómetros puede conllevar reparaciones y sustituciones muy costosas, como el cambio de la correa de distribución.
Para evitar estafas o problemas en la adquisición de un coche de ocasión, es aconsejable solicitar toda la documentación del vehículo e incluso contar la segunda opinión de un especialista que sea imparcial.
Source: Coches
