En España, y según indica un informe de la OCU, Organización de Consumidores y Usuarios, existe un grave problema con el sistema de etiquetas medioambientales de la Dirección General de Tráfico, el cual posee un gran número de fallos en su lucha contra el cambio climático.
La OCU ha denunciado que estas etiquetas están creadas y asignadas basándose, única y exclusivamente, en los diferentes modelos de motor que circulan por nuestras carreteras. Esta medida, sin embargo, es un completo error debido a que no tienen en cuenta las emisiones reales que estos vehículos expulsan al exterior.
Por ello, la Organización de Consumidores y Usuarios pretenden una modificación que consiste, en primer lugar, en no confiar en los datos que indican los fabricantes y comprobar, tal y como hemos indicado líneas atrás, las emisiones reales que expulsan estos vehículos.
¿Cuál es el consumo de los vehículos?
Desde el pasado año 2021, los nuevos automóviles poseen un dispositivo encargado de recoger los datos exactos del consumo de carburante, con el objetivo de que los fabricantes puedan descargar y conocer el número del uso real.
Sin embargo, la Unión Europea, hace algunas semanas, publicó un informe de los citados medidores y, sorprendentemente, hay una diferencia abismal entre los datos reales y los homologados, que son aquellos que anuncian los fabricantes.
Por un lado, los motores de gasolina tienen un consumo real de 7,89 litros por 100 kilómetros recorridos, mientras que los homologados muestran un total de 6,38. En los diésel, la cifra oficial es de 5,82 litros a los 100 y la homologada es de 6,88.
No obstante, en los híbridos enchufables de gasolina y diésel es dónde se encuentra la gran diferencia. En el primer modelo, el real es de 5,97, mientras que el homologado marca 1,76. En los motores gasoil, la cifra es muy similar: 5,83 en el consumo real y 1,41 en el homologado, unos datos significativos y que muestran la gran desigualdad entre un modelo y otro.
¿Cuál es la diferencia real?
Si comparamos los datos ofrecidos en porcentajes, se puede apreciar que existe un diferencia del 23,5% en coches de gasolina y un 18% en vehículos diésel. Esto significa que los usuarios no reciben una información exacta sobre el consumo y el gasto del automóvil, además de poseer un gran número de emisiones más elevado del que le pertenece.
En cuanto a la diferencia de híbridos enchufables, se dispara hasta el 300%. Los datos homologados son muy bajos y su consumo llega a poco más de un litro por cada 100 kilómetros recorridos. Sin embargo, la realidad es que estos vehículos triplican la cifra oficial y reciben la etiqueta 0 emisiones, la cual permite ingresas en Zonas de Bajas Emisiones (ZBE).
Source: Coches