Es una cita imperdible para los amantes del motor, de los automóviles clásicos y, sobre todo, para los más fanáticos de las marcas italianas Fiat, Lancia, Abarth y Alfa Romeo. Heritage HUB es una oda a los más de 100 años de historia de estas marcas automovilísticas que marcaron un antes y un después de no solo en el desarrollo de la automoción en Italia, sino también de su industria y su economía.
Encastrado en Mirafiori, la zona industrial de Turín (Italia) que alojó el antiguo castillo de los Saboya, en la nave 81 se encuentra este enorme espacio que da alojamiento a cientos de vehículos de distintas épocas y estilos. Fiat Mirafiori tiene también el título de ser la planta automovilística más antigua de toda Europa.
En el interior, una zona de cuidado aspecto industrial perfectamente iluminada da la bienvenida a los visitantes, que solo pueden acudir a este museo con visitas guiadas que se reservan a través de la web. Ojo, si las entradas se compran en combinación con las del Museo Nacional del Automóvil de Turín, otra visita imperdible, se puede disfrutar de un descuento.
De las primeras carreras a los modelos experimentales
La exposición de coches se organiza en ocho áreas temáticas perfectamente explicadas, pasando por los pequeños utilitarios, modelos únicos y experimentales de Fiat y Lancia y coches de rallies ganadores de diversos campeonatos en sus respectivos años y vehículos que participaron en viajes hercúleos por África, llegando incluso a Londres.
Destaca, indudablemente, la sección de rallies y competiciones por sus modelos con la publicidad antigua de Martini y la ya desaparecida Alitalia. Entre ellos, encontramos el Lancia D50 de Fórmula 1, el Lancia Beta Montecarlo Turbo y el LC2. Desde Heritage HUB destacan que todos los vehículos siguen en perfecto funcionamiento y que son revisados de manera periódica, algo que los hace aún más especiales.
Alrededor de estas ocho áreas temáticas se encuentran diferentes modelos históricos de las cuatro marcas italianas desde los primeros años de la producción hasta hoy. Como ejemplares curiosos podemos encontrar los coches de los Carabinieri o de los bomberos italianos de las últimas décadas, los Alfa Romeo que hicieron de safety cars en las competiciones de Superbikes o, incluso, el Fiat 500 de Valentino Rossi. No faltan el Lancia Lamba, el 500 Topolino o el Abarth 2400 Coupé Alemanno de Carlo Abarth.
Para conductores de modelos clásicos
Pero Heritage no solo da la oportunidad de ver en vivo y en directo los vehículos de la historia de estas marcas italianas. En la nave 83 del mismo complejo están las Officine Classiche, unas instalaciones dedicadas a la reparación, certificación y restauración de vehículos clásicos Fiat, tanto pertenecientes a la propia marca como a coleccionistas privados.
Los propietarios de vehículos clásicos Fiat pueden acudir a Heritage para solicitar un certificado de autenticidad de su automóvil, que se puede conseguir con el número de bastidor de cada automóvil al emitirse un documento oficial en el que figuran datos como la fecha de producción, datos técnicos, el número de serie del motor y características especiales del exterior y el interior.
Por otro lado, también se organizan exposiciones y eventos en sus instalaciones y participan en salones especializados en automóviles clásicos, encuentros y concursos de elegancia o competiciones como las carreras de regularidad.
Source: Coches
