La movilidad eléctrica avanza lenta pero constante al mismo tiempo que levanta pasiones y críticas a su paso. De la mano con este tipo de vehículos va la creación de las zonas de bajas emisiones, que tratan de reducir el volumen de contaminación favoreciendo la circulación de este tipo de vehículos. Sin embargo, esta medida no está recibiendo una gran acogida por parte de los ciudadanos.
El 54% de los españoles cree que la creación de zonas de bajas emisiones, obligatorias en todos los municipios de más de 50.000 habitantes en el país, atiende a «intereses políticos», según una encuesta realizada por el Observatorio RACE de Conductores, una iniciativa del Real Automóvil Club de España (RACE). La encuesta, realizada este mes sobre una muestra de 1.500 personas, se centra en cómo ve la ciudadanía y en cómo pueden afectarle las zonas de bajas emisiones, ha explicado la organización.
De las conclusiones de la encuesta también se extrae que el 35% de los españoles piensan que la motivación real de la creación de estas zonas obedece a la mejora del medio ambiente, mientras que el 11% restante o bien no tienen clara su respuesta o lo atribuyen a otras razones. Además, solo el 14% de los conductores ha cambiado su coche o plantea hacerlo por uno de emisiones reducidas para poder entrar en las zonas de emisiones bajas.
Más de la mitad, en contra
«Al margen de la motivación, el rechazo a las ZBE es mayoritario: un 61% de los encuestados se muestra en contra de estas zonas, mientras que solo un 31% está a favor», ha señalado la organización.
Por otro lado, la creación de estas zonas «ha afectado o va a afectar» a los desplazamientos del 52% de los habitantes o trabajadores de ciudades de más de 50.000 empadronados, mientras que para un 32% no tendrá ningún impacto en su día a día debido a que su forma habitual de desplazamiento estará permitida.
Un mayor uso del transporte público
Entre los conductores que se van a ver afectados por las ZBE, el 71% que se desplaza en coche se va a reducir hasta un 46%, ha destacado RACE. Se prevé un gran trasvase hacia el transporte público, seguido por aquellos que se desplazarán a pie o en moto, que asciende del 6% al 7%. La bici o el patinete serán opciones muy puntuales.
Otra de las conclusiones de la encuesta recoge que los conductores afirman encontrarse con una «alarmante falta de alternativas», dado que un 31% asegura que evitará las zonas de bajas emisiones en la medida de sus posibilidades, mientras que un 19% no sabe cómo adaptarse porque «no les resulta válida ninguna de las alternativas actuales».
Source: Coches
