Porque vamos con prisas, porque no nos hemos dado cuenta o nos hemos despistado. Hay mil y una razones por las que, sin querer, hemos sacado el coche de un parking y hemos rozado al vehículo que tenemos al lado o detrás. ¿Qué deberíamos hacer en estos casos?
Lo más importante es ser cívico, ante todo. Solo hace falta ponernos en la situación inversa. ¿Nos gustaría encontrarnos con el coche rayado y que el culpable se hubiera marchado sin dar explicaciones? No, así que nosotros tampoco deberíamos hacerlo.
Lo primero que hay que hacer en esos casos es tratar de localizar el dueño del propietario, por si estuviera en las inmediaciones, y contarle lo ocurrido. Si no sabemos quién es y no está cerca del vehículo, le deberemos dejar una nota con nuestros datos.
Dejar datos de contacto y dar parte al seguro
A la hora de redactar este aviso, basta con indicar nuestro nombre y nuestro número de teléfono para que la persona se ponga en contacto con nosotros y, ahí, ya dar parte al seguro y rellenar todos los documentos obligatorios. Podemos dejar la nota sujeta en las escobillas de los limpiaparabrisas, donde seguro la verá.
Una vez que la persona afectada se ponga en contacto con nosotros, habrá que hacer el típico parte al seguro, explicando quién ha tenido la culpa y cómo se ha producido el roce, además de señalar los daños. A partir de este momento, serán las compañías aseguradoras las que se harán cargo de las reparaciones, ya que, aunque solo tengamos una póliza de daños a terceros contratada, esta se encargará de cubrir el coste de los arreglos.
Los seguros a terceros o de responsabilidad civil cubren todos los daños que nosotros hayamos podido provocar a otras personas y vehículos así que, en caso de haber rozado un vehículo aparcado, nuestra póliza asumirá los gastos de reparación.
Source: Coches
