Vamos en el coche y nos encontramos, de frente, con un cruce de varias vías y otros vehículos esperando para pasar, en nuestra misma situación. ¿Quién tiene la preferencia de paso? Si hay señales verticales o en el suelo, no habrá ningún problema para entender en qué orden deben pasar los distintos conductores. ¿Pero y si no las hay?
La norma que rige en estos casos es que la prioridad la ostentará siempre el conductor que esté a nuestra derecha. Esta regla puede parecer un poco lío, ya que hay que reaccionar con mucha precaución y podemos acabar en un bucle infinito si hay varios conductores esperando para pasar en las diferentes calles que desembocan en el cruce.
Deberemos siempre proceder con mucho cuidado, señalizando nuestras intenciones de giro y entendiendo que podremos pasar antes que el conductor que tenemos a nuestra izquierda, pero que antes deberemos dejar pasar al que está a la derecha. Y así deberán proceder todos los conductores involucrados en esta situación. En el siguiente esquema de la DGT se ve más claro cómo actuar.
Excepciones a la regla de la prioridad de paso
Como en toda regla, en este caso también hay excepciones. Siempre prevalecerá esta norma de la derecha, aunque no en cinco escenarios muy concretos, como se puede ver en la imagen. Así, si el cruce está formado por una vía asfaltada y otra sin asfaltar, la prioridad es de quien circula por la carretera asfaltada. Igual sucede si la vía con la que se cruce la nuestra es un carril bici o son raíles: en ambos casos tendrán prioridad los vehículos que circulen por ellas.
En el escenario de incorporación a una vía, la prioridad es de los vehículos que circulan por calle o carretera principal (aquí puedes leer cómo usar los carriles de aceleración o otrenzados) y lo mismo pasará cuando nos aproximemos a una glorieta: tendrán prioridad los vehículos que ya circulen por ella.
Source: Coches