DS es una marca que nació en 2009 para aportar al mercado productos diferentes y diferenciados dentro del segmento premium, y desde luego lo ha conseguido con modelos como el SUV compacto DS 7 y el buque insignia DS 9, sin olvidar a su representante entre los coches pequeños, el DS 3.
Sumida ahora en un profundo proceso de renovación y en pleno crecimiento, la marca de lujo francesa ha lanzado en el último año su compacto más avanzado y ambicioso hasta la fecha, el DS 4.
Este modelo ha sido desarrollado a partir de la plataforma EMP2 del Grupo Stellantis, pero nada tiene que ver con ningún otro producto de la corporación. Desde su estética, hasta su tecnología, todo en este coche tiene una distinguible calidad tanto en la forma como en el fondo.
En el DS 4 destacan las líneas fluidas y aerodinámicas de su diseño, que dan como resultado una silueta deportiva y elegante a partes iguales, acompañado además de la estilizada iluminación DS Matrix LED Vision adaptativa, las grandes ruedas (de 17 a 20 pulgadas) y detalles como los tiradores escamoteables totalmente integrados en la carrocería.
Con ese punto de partida, y para satisfacer la demanda de todo tipo de usuarios, se puede elegir también entre el estilo Performance Line, que incide en el dinamismo, o las características más robustas provenientes del mundo SUV que distinguen a la línea Cross.
Por dentro, sin duda llama la atención la exquisitez de las formas, el juego del diseño mediante aristas y por supuesto la calidad de los materiales (tela, cuero, Alcantara, napa…), perfectamente integrados con las últimas innovaciones de tecnología digital como el cuadro de instrumentos, el sistema multimedia con navegador 3D o la pantalla de control táctil DS Iris System de 5 pulgadas.
También se ha hecho hincapié en la ergonomía y la simplificación, para lo que se ha recurrido a asientos de alto confort y soluciones como el interruptor E-Toggle para manejar el cambio automático (de serie en todas las versiones) o los aireadores DS Air disimulados hábilmente en el centro del salpicadero.
Variada tecnología
Actualmente la gama mecánica es muy completa, con las opciones PureTech gasolina y diésel BlueHDi de 130 caballos como acceso a la gama y la más avanzada y moderna E-Tense híbrida enchufable de 225 caballos en lo más alto.
Esta variante, además de por su potencia, que emana de un motor gasolina de 180 caballos y otro eléctrico de 81 kW, destaca por la batería de iones de litio de 12,4 kWh, que le permite alcanzar una autonomía media en modo eléctrico de 62 kilómetros. Gracias a esta tecnología, el DS 4 E-Tense está catalogado con la etiqueta Cero de la DGT, y ello le confiere ventajas fiscales y de movilidad que constituyen un alto valor añadido.
Pero no sería un coche del segmento premium si su conducción no estuviera a la altura, y para eso se vale, en primera instancia, de recursos como el DS Active Scan Suspension, que adecúa la amortiguación en tiempo real a las condiciones del asfalto mediante una cámara y varios sensores; el sistema DS Night Vision para detectar de noche peatones o animales por infrarrojos a una distancia de hasta 200 metros, y por supuesto el DS Drive Assist que entre otras cosas puede regular de forma automática la distancia y la velocidad del coche con respecto al vehículo precedente.
El DS 4 cuenta con cuatro acabados: Bastille, Trocadero, Rivoli y Opera, y el precio arranca en los 33.300 euros de la versión básica de gasolina de 130 caballos. En el caso de la variante E-Tense híbrida enchufable, el punto de partida está en 45.500 euros, pero son aplicables los hasta 5.000 euros de ayuda del Plan Moves III, una excelente oportunidad de adentrarse en el mundo premium con un modelo muy distinguido y eficiente.
Source: Coches