Después del Astra en sus dos carrocerías, la compacta de cinco puertas y la familiar Sports Tourer, la nueva “submarca” GSe para vehículos electrificados de Opel recibe como miembro al SUV compacto Grandland en su versión híbrida de 300 caballos.
Estéticamente, este modelo de tintes deportivos se caracteriza por unas llantas de aleación específicas de 19 pulgadas, difusor trasero y el logotipo GSe en el portón, mientras que el capó puede ir en el color de la carrocería o en negro como opción.
Por dentro, los asientos con certificación AGR para cuidar la salud postural tienen un diseño más envolvente y tienen tapicería de piel con el logotipo insertado, mientras que el resto del habitáculo cuenta con elementos metálicos en contraste con el tono oscuro general.
Este Grandland GSe está impulsado por un motor eléctrico en cada eje en combinación con el propulsor gasolina 1,6 turboalimentado que completa el sistema híbrido enchufable de 300 caballos, y además de contar con tracción total ofrece unas prestaciones que lo posicionan como un perfecto integrante de la familia GSe, ya que es capaz de acelerar de 0 a 100 km/h en solo 6,1 segundos y alcanzar una velocidad máxima de 235 km/h.
Para mejorar el comportamiento de esta versión, cuenta con amortiguadores y muelles más firmes con tecnología Koni Frecuency Selective Damping (FSD), y también se ha actuado sobre la dirección para que tenga una respuesta más precisa.
Además de las mejoras dinámicas, este modelo está catalogado con la etiqueta Cero de la DGT y ofrece una autonomía eléctrica de 59 kilómetros, con lo que se beneficia de ventajas fiscales y de movilidad en los grandes núcleos urbanos.
El nuevo Opel Grandland GSe llegará la próxima primavera, pero de momento no se han dado a conocer los precios.
Source: Coches